El presidente municipal de Pachuca, Jorge Reyes, se deslindó de la presencia policiaca durante la marcha del 8 de marzo y señaló que la policía municipal acudió únicamente en respuesta al llamado de apoyo, realizado por la Dirección de Seguridad Pública Estatal.
Sin embargo, el alcalde aseguró que los elementos municipales solo brindaron acompañamiento, pues el gobierno local fue respetuoso de la manifestación, ya que dijo, las participantes estaban en todo su derecho de recorrer las calles.
Indicó que en ningún momento el municipio dio resguardo a los monumentos ni desplegó elementos en las calles. También afirmó que hasta el momento, no han recibido ningún reporte de denuncias en contra de los uniformados y que su conocimiento de estos hechos, proviene de lo publicado en redes sociales.
El alcalde mencionó que tras la marcha y las pintas realizadas en el Reloj Monumental, se deberá realizar una nueva evaluación para determinar el costo de la limpieza del grafiti y el mantenimiento de la estructura.
Explicó que ya se tenía un presupuesto aproximado de un millón de pesos para estos trabajos, pero ahora será necesario un nuevo dictamen por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBAL) para determinar si habrá un incremento en los costos.
Asimismo, indicó que su administración no interpondrá ninguna denuncia en contra de las manifestantes, pues tienen claro el derecho a la libre expresión.
En cuanto a los daños reportados por los artesanos, señaló que se registraron afectaciones en vitrinas y mercancía, por lo que se trabajará en su reposición.
Durante la marcha del fin de semana, al final del recorrido, un grupo de granaderos se enfrentó con las manifestantes, a quienes rociaron con gas. Además, se reportó la detención de varias jóvenes, incluyendo menores de edad. También se denunció la presencia de policías de los municipios de Mineral de la Reforma y Pachuca, así como de elementos estatales.
