Si eres amante del café, con certeza conoces la empresa multinacional Starbucks, y aunque en la región de Tulancingo aún no contamos con ninguna sucursal, en la actualidad existen más de 36 mil sucursales a nivel mundial; así que ya se podrán imaginar lo que viene a continuación.
La primera tienda de Starbucks apareció en el mercado histórico de Pike Place, en la ciudad de Seattle en 1971. Era una tienda que ofrecía café tostado, rico y fresco, muy difícil de conseguir en esa época, además de servir también algunos alimentos.
Ese negocio surgió de la idea de tres amigos: Gordon Bowker, Jerry Baldwin y Zev Siegl quienes, a pesar de su grandiosa idea local, nunca imaginaron que se convertiría en la gran compañía que es hoy en día.
El gran éxito de la empresa surgiría gracias a Howard Schultz, un hombre de negocios que, desde su primera visita, quedó sumamente atraído por el sabor y el concepto, y esto lo hizo no solamente querer regresar a la tienda, sino también incorporarse a la empresa, y que lo lograría con éxito un año más tarde. Pero fue hasta 1987, después de realizar viajes y uno que otro experimento propio, cuando decidió comprar a Starbucks junto a otros inversores locales para convertirla en la máxima compañía que es al presente.
Como desde sus inicios, eran los mismos dueños los que atendían el lugar, el ambiente era muy genuino y agradable. A todo mundo saludaban y se conocían, y esa fue una de las cosas que enamoró a Howard Schultz y que se convertiría en el sello característico de su servicio personalizado.
Es por eso por lo que, además de ofrecer una gran variedad de bebidas con café de alta calidad, tés e infusiones, sin olvidar, por supuesto la diversidad de alimentos; la formación y desarrollo de los colaboradores, así como la conexión comunitaria y la innovación constante se transformaron en los distintivos de la empresa.
Entonces no es de sorprenderse que el actual dueño y autor de su gran crecimiento y reconocimiento por su modelo de negocios, creara un lugar donde se pudiera mostrar de forma sensorial la manera en como obtienen sus productos, es decir, mostrar a sus clientes desde la información de los granos de café y su tostado hasta la elaboración de las bebidas justo antes de que se entreguen en las manos.
Estamos hablando de la fabricación previa, pero puesta al descubierto de una manera más atractiva. Dicho con otras palabras, fue así como nacieron los “Starbucks Reserve Roastery”.
“Starbucks Reserve Roastery” es la tostaduría o fábrica tostadora de café en su traducción al español, que muestra una experiencia nueva al cliente, pero dentro mismo concepto acogedor que se encuentra en cualquiera de sus tiendas, es decir, con música y decoración con diseño, además de un extra que serían los colaboradores expertos.
La tostaduría más grande de Starbucks se encuentra en la ciudad de Seattle, pero la más reciente y la que yo visité está sobre la avenida Michigan en Chicago.
“The Chicago Roastery” fue inaugurada en el 2019 y consta de cinco pisos, cada uno con un escenario y taller distinto. En el primer piso se puede observar el tostado del café y la barra de recogida, además de un par de murales, un tablero que muestra datos random sobre el café y la ciudad de Chicago, así como algunos productos para comprar.
La segunda planta está dedicada a la panadería italiana, seguida por el tercer piso que ofrece creaciones innovadoras de café y almuerzos. El cuarto piso es de los más concurridos, ya que se puede disfrutar de coctelería preparada con café y té atendida precisamente por mixólogos locales de Chicago. El último piso, que es el quinto, se encuentra la terraza que muestra una vista única y tranquila de la avenida Michigan. En cualquiera de las 5 plantas puedes acceder por elevador o escaleras, las cuales yo recomiendo más pues de ese modo puedes observar el asador y su proceso desde el inicio hasta el final.
Lo más importante de las visitas en “Starbucks Reserve Roastery” es que realmente te involucras en el proceso y el valor de este. Sin duda es toda una experiencia.
Así que si quieres empezar a ver diferente la manera en como se prepara el café de Starbucks, sin duda alguna esta es una experiencia que debes tener. Y no importa si estás de acuerdo con los precios o no, porque vivimos en una era donde estamos a favor y en contra de todo sin conocer las causas o las consecuencias de nada, entonces es mejor vivir la experiencia y después ya me contarás.
