Ángel Alfredo Aguilar López, suegro del taxista, David Ulises Ávila Diego, quien fue privado de la vida el pasado fin de semana, hizo un llamado al gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca Salazar, y al procurador de Justicia, Francisco Ángel Fernández Hasbun, para que este crimen no quede impune y se agilicen las investigaciones.
El entrevistado, quien también se dedica al transporte público, dijo que la víctima dejó en la orfandad a una niña, de ocho años de edad.
“Fue un crimen artero, esperamos que las autoridades lo esclarezcan, porque todo el gremio está indignado, él solo estaba trabajando y no merecía morir de esta manera”.
Dijo que su yerno también se desempeñaba como inspector de la dirección de Licencias y Permisos, de la presidencia municipal de Tulancingo y por las tardes, laboraba en el taxi.
Agregó que en la agencia del Ministerio Público (MP), le informaron que este caso se turnaría a una instancia especializada en muertes violentas, de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH).
Aguilar López, citó que a casi una semana del asesinato de su yerno, la unidad que conducía David Ulises, todavía se encuentra a disposición de las autoridades, por lo que solicitó la devolución de la misma, para que se trabaje, ya que la situación económica por la que atraviesa la familia, es difícil.
Estos hechos ocurrieron el domingo anterior, alrededor de las dos de la mañana, en un camino de la colonia El Pedregal, en Cuautepec de Hinojosa.
La víctima fue atacada con arma blanca y minutos después, este lugar se vio lleno de patrullas y ambulancias, así como de un gran número de taxistas, que acudieron en apoyo de su compañero, quien murió en el lugar de los hechos. El caso, quedó asentado en la Carpeta Única de Investigación, 18-2024-05208.