Aunque existe un proyecto integral de sustitución de drenaje y pese a que la red, suma más de 60 años de servicio, aún es funcional, informó Luis Enrique Hidalgo, director de la Comisión de Agua y Alcantarillado de Tulancingo (CAAMT).
El funcionario, dijo que han hecho valoraciones en las redes de 21 de Marzo y Juárez, justo donde se generan los mayores encharcamientos cuando llueve y durante el último trimestre del año, hubo situaciones complicadas, sobre todo en las áreas del Instituto Mexicano del Seguro Social y el crucero Huapalcalco.
“El tema, es el de los comercios, por ejemplo, en los mercados, algunos locatarios tiran la grasa, lo cual provoca afectaciones. Hay secciones, en las que se tendría que cambiar, pero sigue siendo funcional, obviamente si hacemos un proyecto integral, el costo sería muy elevado”.
Respecto a la colonia Insurgentes, el entrevistado puntualizó que realizan los estudios pertinentes para hacer una interconexión a efecto de que el agua salga por los drenes que ya están limpios, porque hay anegamientos en ese sector.
Agregó que también existe un proyecto con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), para que la interconexión sea de la calle Pino Suárez al dren San Luis y se pueda incorporar al dren Colomer.
Reiteró que el acumulamiento de basura tiene que ver con los encharcamientos, ya que por su situación geográfica, Tulancingo es prácticamente un escurridero, incluso el agua cuando llega por una precipitación hasta ayuda a destapar las coladeras.
En cuanto al robo de alcantarillas, el funcionario expuso que además del menoscabo al erario, es un problema que puede generar accidentes y señaló que en el centro de Tulancingo, contabilizan por lo menos 10 coladeras abiertas.
“En algunos videos, se puede apreciar que algunos pepenadores paran en el punto donde hay una tapa, mueven sus bolsas y al otro día, ya no se encuentra la rejilla”.
Hidalgo Hernández, comentó que lo anterior genera un gasto no considerado, pero deben subsanarlo de inmediato porque puede haber afectaciones.
En la reposición de cada una de las tapas robadas, estimó que la CAAMT eroga alrededor de 20 mil pesos, ya que el acero incrementa su precio.
También, advirtió que hay quienes cortan la tubería y provocan un daño colateral, ya que el medidor también resulta afectado, aunque esta práctica delictiva no es tan recurrente como el robo de rejillas.
Puntualizó que para evitar este tipo de ilícitos, trabajan conjuntamente con las direcciones de Seguridad Pública y Prevención del Delito