La activista Lorena Rivera Garnica, encargada del santuario Cuatro patitas un Corazón, dio conocer que temen represalias de parte del Ayuntamiento de Mineral del Monte, luego de las denuncias que se realizaron en contra del alcalde Alejandro Sierra Tello y la solicitud de desafuero al Congreso local.
Explicó que esto se deriva de los hechos sucedidos el 9 de enero, donde fueron reprimidos durante una manifestación, en la que además de golpes también hubo amenazas.
Precisó que la manifestación que realizaron, fue para exigir justicia por la desaparición de 13 caminos del santuario Cuatro patitas un Corazón, ya que el 1 de enero fueron sustraídos de manera ilegal 13 caninos del lugar que se ubica en Mineral del Monte.
En la manifestación refirió donde llegó el edil, quien de manera prepotente les exigió liberar la vía, posteriormente envió a sus policías quienes mediante golpes disolvieron la manifestación y detuvieron a varias personas, incluida a Lorena y su esposo.
Por estos hechos, se iniciaron las denuncias correspondientes tanto en la Procuraduría de Justicia como en la Comisión de Derechos Humanos, así también acudieron al Congreso donde pidieron a los diputados, que se iniciara un proceso de desafuero en contra del edil.
Dijo que en este punto, los diputados señalaron que van a checar si cuentan con las facultades para que puedan mandar a comparecer al alcalde, además de qué se les ofreció apoyo jurídico, y seguimiento al caso.
También se comprometieron hacer un pronunciamiento por este incidente, indicó que todo parece que será un proceso largo por lo cual, insistieron en solicitar el apoyo ciudadano.
Destacó que esto no los deja satisfechos, ya que requieren que haya mayor interés en parar los abusos del alcalde, por lo que también acudirán al la sede del PRI, donde pedirán que el edil sea desconocido de su partido.
Lorena Rivas señaló que ya fueron recuperados 11 de los 13 animales que fueron sustraídos del santuario y solamente faltan dos por recuperar. Sin embargo, señaló que desde los hechos, no han podido regresar al lugar y este tuvo que ser cerrado.
Dijo que temen no sólo por la seguridad de los perros sino también por su integridad