Después de los hechos ocurridos en Puebla, urgen diputados de la LXV Legislatura Local a ediles de la Zona Metropolitana de Pachuca, no solo revisar horarios de establecimientos, también cerrar bares clandestinos.
Citlali Jaramillo Ramírez del Grupo Plural Independiente, afirmó que el caso de Ernesto Calderón, que ha conmocionado a la sociedad en general, es una llamada de atención y no solo porque, cuatro jóvenes hidalguenses están involucrados, sino por la laxidad en la justicia.
“Lamentablemente fueron ocho que atacaron a un joven -Neto-, lo cual ha generado violencia en redes sociales, donde las familias han quedado expuestas, desde su identidad hasta la familia a la que pertenecen.
Todo ello, se agrava con haber puesto “precio a la cabeza”, lo cual significaría más violencia que ahora se dispersa sin límites.
Si bien, la legisladora se pronunció a favor de la detención de quienes estén involucrados en la golpiza propinada en las inmediaciones de la plaza Angelópolis, es necesario que esta situación no quede impune.
“Es lamentable que a los ojos de todos, estén pasando estas cosas; no hay restricciones y se fomenta la violencia. Estamos en los primeros lugares de alcoholismo y consumo de estupefacientes”.
Urgió a los presidentes municipales, a actuar conforme a derecho y regular como es debido, los permisos que son autorizados para que antros y bares, operen de forma cotidiana.
Uno de los problemas detectados en este tipo de giros, es que cierran un lugar y los jóvenes “atraviesan” una calle y ya están en el municipio vecino, donde existen mayores facilidades para el consumo desmedido.
Lamentó que la mayoría de estos lugares no cumplan con los requisitos indispensables de los protocolos marcados por el Sistema de Protección Civil y se permita su proliferación sin respeto a los reglamentos municipales.

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