En Hidalgo es utilizada la semilla mejorada de flor de cempasúchil proveniente de China, Estados Unidos, Japón o India, misma que no da simiente, alertó el diputado de Morena Timoteo López Pérez.
Al presentar un posicionamiento en el Congreso, advirtió de esta modificación genética para aumentar el número y tamaño de sus flores, lo que hace que tengan colores más intensos y ciclos de cultivo más cortos.
Sin embargo, dijo que ello provoca que se reduzcan los aceites que le dan el olor característico.
Además, no dan semilla, pero si “llegan a dar, pueden no ser viables”.
Dijo que este producto es considerado como símbolo de identidad nacional, pues es endémica de América y se compone de 58 especies, de las que 35 habitan en México.
“Es una flor muy mexicana, pero que ha sido tomada por países como China, que hoy es potencia en su producción”, expresó.
Insistió en que la venta de la flor alterada genéticamente, afecta a los productores locales y los hace perder millones de pesos.
Recordó que el cempasúchil es un “emblema” del Día de Muertos, ya que se utiliza para adornar los altares cada 1 y 2 de noviembre.
“México no figura en el mercado internacional en cuanto a la venta de cempasúchil; de hecho, los líderes en producción y exportación son China, con 75 por ciento del mercado; India, con 20, y Perú, con 5 por ciento”, expuso.
Exhortó a los consumidores de la flor nativa a comprar cempasúchil nativo, pues acusó que la semilla china, es un híbrido que se usa para los cultivos y es la que tiene mayor presencia.
“La que se cultiva y vende en maceta y que germina la planta color naranja vibrante, con tallo erguido y flor con mayor volumen y redondez, es la modificada”, advirtió.
Pidió apoyar al comercio local que “se esforzó” en sus huertos por cultivar la flor de cempasúchil”