Debido a las lesiones graves que sufrió por el uso indebido de la fuerza policial, Leobardo H.R., poblador de Xuchitlán, San Salvador, se encuentra en terapia intensiva “en muy malas condiciones generales”, con pronóstico reservado para la vida, informó el titular de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), Alejandro Habib Nicolás.
Tras presentar la recomendación emitida contra Uriel de Jesús Moreno Castro, comisario de la Agencia de Seguridad del Estado de Hidalgo ( ASEH), un inspector y el agente que disparó la carga química a la cara del poblador el pasado 1 de junio, en una manifestación afuera de palacio de gobierno para exigir obras, el ombudsman dijo que la víctima tiene “alto riesgo” de mortalidad y discapacidad, así como complicaciones post operatorias como neuroinfección, hipertensión endocraneal y herniación de masa encefálica.
Según los reporte del Hospital General de Pachuca (HGP) entregados a la CDHEH, el poblador indígena sufrió traumatismo craneoencefálico severo, fractura contusocontundente penetrante a cráneo, así como fracturas multifragmentaria hemoidal, estenoidal y frontal; sangrado de tallo cerebral; hemorragia; edema cerebral, y traumatismos facial, de huesos de la nariz y orbitaria bilateral.
Aunque un grupo de neurocirujanos hizo a Leonardo una intervención de control de daños, este tuvo una lesión en el área frontal con exposición de masa encefálica “de varia horas”, además de alto sangrado, por lo que el pronóstico es “malo para la función”.
De acuerdo con la recomendación R-VG-0002-21, se acreditó violación al derecho a no ser sometido al uso desproporcionado o indebido de la fuerza pública en la protesta que derivó en enfrentamiento entre manifestantes y policías estatales.
Por ello, la Comisión de Honor y Justicia de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Hidalgo (SSPH) deberá iniciar un procedimiento de investigación contra el inspector J. M. B. C. y el agente A. B. R.
Además, garantizar el pago de la reparación integral del daño a Leobardo y capacitar a los elementos policiacos en del uso de la fuerza adecuado con armas no letales, como sustancia tóxica y gases lacrimógenos), autodefensa, sometimiento, aseguramiento, persuasión y control de multitudes.
Asimismo, la CDHEH instó a la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH) a continuación con la integración de las carpetas de investigación respectivas y, de ser judicializadas, acompañar a la víctimas directas e indirectas del hecho.
Hasta el momento el policía A. B. R., se encuentra vinculado a proceso por el delito de lesiones culposas, acusación que enfrenta en libertad.
“Es importante que se les dé una capacitación permanente en el uso de protocolos (…) para que no vuelva a suceder esto que aconteció (…) hay disposiciones internacionales que establecen que cuando se hace uso de estas armas (multilanzador de gas lacrimógeno), no se les debe de apuntar directamente hacia las personas ni pueden disparase de la cintaba hacia arriba”, añadió.
Respecto de la muerte de una doctora en las barandillas de Progreso de Obregón, por la que siete trabajadores de la policía local fueron vinculas a proceso por el delito de feminicidio, el ombudsman señaló que los comunicados emitidos por el ayuntamiento la revictimizan. En los escritos, la alcaldía afirmó que la profesionista se había suicido, versión que negaron los familiares.
Habib Nicolás recordó que, según el diagnóstico de la CDHEH, la mayoría de las áreas de retención primaria son inaceptables, no cuentan con división para hombre y mujeres, les faltan sanitarios o no cuentan con servicio medico para certificación gratuita, lo que viola los derecho humanos de los retenidos
