El grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), presentó una iniciativa para reformar la Ley Estatal de Agua y Alcantarillado e incrementar las sanciones económicas por extraer el líquido de las tomas de forma ilegal.
Según la propuesta presentada en sesión del jueves, quien haga huachicoleo de agua de uso no doméstico, será castigado con penas que van de las mil hasta las 3 mil veces el valor de la Unidad y Medida de Actualización (UMA): hasta 288 mil 660 pesos.
Para el que emplee mecanismos para succionar agua de las tuberías de distribución, conecte un servicio sin la autorización del prestador del servicio o proporcione los servicios a inmuebles de uso doméstico en que se encuentre suspendida una toma, la pena máxima será de 28 mil 866 pesos (300 veces el valor de la UMA).
La diputada tricolor Citlali Jaramillo Ramírez, expuso que no se puede continuar normalizando el hurto del líquido a través de tomas clandestinas, por lo consideró necesario endurecer las sanciones por esta conducta ilícita.
“Es gravísimo el robo del agua, el otro huachicol, el huachicoleo del agua”, mencionó en la tribuna.
La legisladora priista añadió que la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Cassim), ha reportado que actualmente cuenta con un registro de 280 mil tomas; además, estima que la cifra de tomas clandestinas que se conectada a su red de agua potable ya supera las 40 mil, lo cual “en buena medida” contribuye a que en la zona metropolitana de la capital se agudice y se encarezca en mayor medida el brindar el servicio a la población.
Otra falta por la que se propone aplicar la máxima pena en uso domiciliario y uso no domiciliario del agua es por la alteración, por cualquier vía, del consumo marcado por los medidores o por impidan la inspección o verificación de datos a los inspectores, de acuerdo con el artículo 164 de la Ley Estatal de Agua y Alcantarillado.
Además, por no dar cumplimiento a la Norma Oficial Mexicana respecto a los límites máximos permisibles de contaminantes en las descargas de aguas residuales a los sistemas de alcantarillado urbano y municipal